Foto de archivo de Oriol Junqueras. AFP


El Tribunal Supremo español decidió este lunes mantener en prisión al ex vicepresidente catalán, Oriol Junqueras, y a otros tres destacados líderes independentistas, y concedió la libertad provisional bajo fianza a otros seis, indicó en un comunicado.

Junqueras, el ex consejero de Interior Joaquim Forn y los líderes de las asociaciones secesionistas Asamblea Nacional Catalana, Jordi Sánchez, y Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, continuarán así encarcelados.

El juez instructor Pablo Llarena, del Tribunal Supremo, así lo decidió por el "riesgo de reiteración delictiva" que presentan, indicó la corte en un comunicado.

Los otros seis encarcelados, entre ellos el ex portavoz Jordi Turull y el ex consejero de Exteriores Raúl Romeva, podrán salir si depositan una fianza de 100.000 euros. La ANC ha hecho saber que se dispone a pagar las fianzas hacia las 12H00 (11H00 GMT) en un banco de Barcelona.

El Tribunal hizo su anuncio a pocas horas de que comience, este lunes por la noche, la campaña de las elecciones regionales catalanas del 21 de diciembre.

En virtud de la decisión, Junqueras, cabeza de lista de Esquerra Republicana de Catalunya, no podrá participar en la campaña, que previsiblemente estará dirigida por su número dos, Marta Rovira.

Tampoco podrán hacerlo Joaquim Forn ni Jordi Sánchez, que figuran en la lista del cesado presidente catalán Carles Puigdemont. Éste se encuentra a su vez en Bruselas con otros cuatro ex miembros del ejecutivo, y este lunes declaraban de nuevo ante el juez en el marco del pedido de entrega emitido por España.

Las elecciones fueron convocadas por el gobierno central español, que el 27 de octubre pasado cesó en su totalidad al ejecutivo independentista catalán y disolvió la cámara regional después de que ésta declarara unilateralmente la independencia de Cataluña.

Los miembros del cesado gobierno catalán ingresaron en prisión provisional el pasado 2 de noviembre, como sospechosos de rebelión (un delito penado con hasta 30 años de cárcel), sedición y malversación.

Se les acusa de haber alentado "un movimiento de insurrección activa" para lograr la independencia unilateral de Cataluña, ignorando todas las decisiones de la justicia, entre ellas la prohibición del referendo de autodeterminación del 1 de octubre.

Por su lado, Jordi Sánchez y Jordi Cuixart están acusados de sedición, por participar en una manifestación de independentistas que el 20 de septiembre pasado acorralaron a guardias civiles mientras efectuaban registros en un edificio del gobierno catalán.